Alemania consiguió por fin ganar el festival de Eurovisión en su 27ª edición (1982). Hablamos, por supuesto, de la Republica Federal de Alemania o Alemania Occidental, dado que la unificación de las dos Alemanias no había tenido lugar aún.

Alemania era junto con Bélgica el único de los siete países participantes en la primera edición de 1956 que todavía no había ganado el certamen. Los alemanes no habían faltado nunca al festival y en las veintiséis ediciones anteriores habían buscado la victoria con intérpretes y canciones de una calidad asombrosa. Habían tocado todos los estilos, desde el pop fresco a baladas potentes, y se habían quedado a las puertas en más de una ocasión, siendo terceros en muchas ocasiones y dos veces segundos. Pero el triunfo se les escapaba siempre a pesar de que un año y otro entraban en las quinielas como favoritos. Ein Bibchen Frieden cantada por Nicole era una de esas canciones nacidas para ganar un festival de la canción, tenía todos los ingredientes necesarios, era dulce, pegadiza, y hablaba de amistad, de amor y de paz. Nicole interpretó la canción integramente en alemán, pero trás ganar el festival celebró su victoria cantando las estrofas también en inglés, francés y holandés, para deleite de la audiencia congregada ese año en Harrogate, Reino Unido, que aplaudió el gesto fervorosamente.

La victoria de Alemania alegró sobremanera a la familia eurovisiva y pocas veces la unanimidad y el regocijo común fueron tantos. A Little Peace, como se tradujo al inglés la canción, llegó al numero 1 en el Reino Unido, algo poco frecuente para una ganadora de Eurovisión.

España quedó en 10ª posición con la canción Él, interpretada por Lucia. Israel quedó en segunda posición pero a una gran distancia de la triunfadora absoluta de la noche. Nadie ni nada eclipsó la feliz victoria de los alemanes.

Nos vemos en Munich en 1983