Lisboa 2018

  63º Festival de la Canción de Eurovisión
Toy (Netta Barzilai) - Israel

 

La 63ª edición del Festival de Eurovisión se celebró en el Altice Arena de Lisboa, capital de Portugal, los días 8, 10 y 12 de mayo de 2018 tras la victoria en 2017 de la canción "Amar Pelos Dois" interpretada por Salvador Sobral. El Altice Arena, anteriormente conocido como Pavilhão Atlántico, fue construido para la Exposición Internacional de 1998 y es el estadio multifuncional más grande de Europa. Con aforo habitual para 20.000 personas, el Altice Arena permitió, una vez acondicionado para el festival, que 12.000 personas pudieran presenciar en directo el espectáculo.

Israel, con la canción Toy, interpretada por netta Barzilai, se alzó en Lisboa con la que sería su cuarta victoria en el certamen, justamente 20 años después de la victoria de Dana International con su archifamoso Diva. La propuesta estética, el uso del looper en el que Etta es una experta, la temática anti acoso de la letra y un estribillo casi insoportablemente pegadizo habían convertido a la representante israelí en la gran favorita de este año desde que la canción se presentara al público en el mes de marzo y llegó a la capital lusa como la única y clara aspirante al ya icónico micrófono de cristal. Ninguna otra canción parecía que fuera a hacerle sombra hasta que en la primera semi-final apareció escena Eleni Foureira, la cantante representante de Chipre, y con su abrasadora interpretación de "Fuego" dio un vuelco espectacular a las apuestas y, aupada por su espectacular directo, a punto estuvo de dar una verdadera sorpresa. Finalmente, sin embargo, hubo de conformarse con la segunda posición, lo que en cualquier caso suponía un éxito enorme para ese pequeño país mediterráneo y su mejor posición hasta la fecha. Igualmente sorprendente fue la tercera posición de Austria, aupada por los votos del jurado que la eligieron como la mejor canción de la noche (recibió más veces 12 puntos del jurado que la propia Israel) pero que solo fue 13ª en el televoto. Aunque aún casi más sorprendente fue ver como la canción de Suecia, segunda según el jurado, quedaba en el puesto 23º del televoto dejando al cantante sueco en séptima posición. En general, y al contrario de lo ocurrido el año anterior, en esta edición los votos del jurado y del publico divergieron enormemente. Frente a la abrumadora e incuestionable victoria de Salvador Sobral el año anterior con 758 puntos en total y la unanimidad del televoto y del jurado, Israel este año solo se llevó la victoria del televoto y un tercer puesto del jurado sumando un total de 529 puntos (229 por debajo del cantante portugués en 2017).

La actuación del Reino Unido fue interrumpida por un espontaneo que subió al escenario y consiguió quitar el micrófono a la interprete británica Surie para lanzar un alegato contra la prensa "nazi" y pedir "libertad". Evidentemente contrariada la cantante británica continuó bailando, dando palmas al son de los coros que seguían cantando y de la música que seguía sonando. La televisión solo mostró al intruso unos instantes ya que enseguida la producción portuguesa desvió la atención mostrando imágenes de los fans hasta que Surie recuperó su micrófono 15 segundos, una vez que los agentes de seguridad se llevaran al espontaneo. La organización dio la posibilidad al Reino Unido de volver a interpretar la canción pero la oferta fue rechazada. Esta era la tercera vez que un espontaneo invadía el escenario de Eurovisión y la primera que conseguía robar el micrófono e interrumpir la interpretación. En 2010 un bailarín no invitado se unió al cantante español Daniel Diges, quien, en aquella ocasión, sí aceptó la oferta de la organización e interpretó la canción nuevamente al final de la gala, y mucho antes, en 1964, un espontáneo subió durante las votaciones al escenario para protestar contra las dictaduras de Franco y Salazar.

En el 50 aniversario de la victoria de Massiel en Londres con su La,La,La, España estuvo representada por Amaia (ganadora de Operación Triunfo 2018) y Alfred (cuarto clasificado en dicho concurso) con el tema "Tu Canción". La dulzura y sencillez de los dos y la relación sentimental surgida entre ellos durante el programa les hizo ganarse el cariño de la audiencia española que los eligió para representar a TVE con un tema que estaba inspirado precisamente en ambos. "Tu Canción" empezó su andadura eurovisiva con muy buenas sensaciones y ocupando buenas posiciones en las casas de apuestas, pero se desinfló poco a poco a medida que se acercaba la fecha definitiva y cayó en picado en la recta final muy probablemente debido a la torpe, indecisa y siempre poco efectiva puesta en escena, algo que ya parece haberse convertido en el talón de Aquiles de la delegación española cada año. Finalmente España hubo de conformarse con el puesto 23º de un total de 26 países participantes en la final. Por vez primera, Rusia, Azerbaijan y Rumania no alcanzaron la final.

Dos reinas del fado, Mariza y Ana Moura, abrieron la gala con la que Portugal se mostraba al mundo. Tras ellas, el dúo portugués de DJ Beatbombers unieron tradición y modernidad para poner ritmo al desfile de banderas e intérpretes de los 26 países participantes. En el intermedio, el ganador del año anterior, Salvador Sobral, regresaba a los escenarios después de su trasplante de corazón para interpretar una canción de su nuevo álbum acompañado solamente por un piano, tras lo cual, se le unió el cantante y compositor brasileño Caetano Veloso para interpretar juntos la canción ganadora de la edición anterior, la encantadora "Amar Pelos Dois", en el que fue uno de los momentos más emotivos de la noche.

En cuanto a mí, este fue por fin el año. El año en que pude cumplir el sueño de asistir en directo a la final del festival de Eurovisión. Una ilusión que me había acompañado siempre desde niño y que finalmente se hizo realidad. Si! Estuve en Lisboa! Y he de decir que estar allí, en el Altice Arena, mientras Europa y el mundo entero veían por televisión como se desarrollaba la competición, fue una experiencia increíble y maravillosa que voy a llevar conmigo siempre. Gracias Lisboa, gracias Portugal, por dejarnos subir a todos a bordo.

Nos vemos en Israel en 2019