La 44ª edición del festival de Eurovisión se celebró en Jerusalem. Esta era la segunda vez que el festival se celebraba en ese país, siendo estas las dos únicas ocasiones en que se había celebrado fuera de Europa. Por vez primera no hubo orquesta y los países estrenaron la norma que les permitía cantar en cualquier idioma.

La canción ganadora de este año, ya estaba cantada en Inglés. Por su parte, el dos veces ganador del festival, Johnny Logan (1980 y 1987), criticó duramente la ausencia de orquesta sugiriendo que esto convertía a Eurovisión en un karaoke gigante.

La norma que impedía presentarse a los países peor clasificados en las anteriores ediciones siguió en vigor pero este año se creó el Big Four (tendría que ser el Big Five pero la ausencia de Italia del festival lo dejó en cuatro) que aseguraba que Francia, Alemania, Reino Unido y España participarían todos los años, independientemente de sus puntuaciones, por tratarse de los mayores contribuyentes económicos de Eurovisión. Una norma injusta, sin duda, una especie de gracia similar al veto del que los USA gozan en la ONU. Es lo que tiene ser más rico que otros. Todo se compra. ¿O no?

En fin, Charlotte ganó con su Take Me To Your Heaven, una festivalera canción, muy al estilo ABBA, que dio a Suecia su cuarta victoria y les permitió organizar la Milennium Edition del festival en Estocolmo en el 2000.

Islandia logró su mejor puesto en el festival hasta esa fecha con una segunda posición y estuvo arañando el triunfo hasta el final. Israel, país organizador quedó en 4ª posición. Lydia, la representante española, con un único punto concedido por Croatia, se llevó el último puesto del festival pero ganó el premio -no oficial- al intérprete peor vestido del evento luciendo, es un decir, un modelito technicolor de Ágata Ruiz de la Prada. De su canción "No Quiero Escuchar" sólo cabe destacar lo premonitorio del título.

Nos vemos en Estocolmo en el año 2000!!!